viernes, 30 de marzo de 2007

Abecedario

Sueño y vida empiezan por ese.

viernes, 16 de marzo de 2007

Yo buceo, tú buceas

Soy frikie. (Dicen los escritores que no hay que empezar un texto por una evidencia, pero como soy de la era blogger, puedo hacer lo que quiera, ¿no?). Y, como frikie, mientras la gente normal está en la carpa, se me ha ocurrido, entre otras cosas que no contaré aquí, mirar cómo explica cada uno la salida de Quintero de TVE. (Gran pérdida).
Es muy gracioso porque unos aseguran, como la propia TVE, que es estrictamente "por enfermedad" (Quintero incluso ha presentado un certificado médico). Otros hablan de la censura de la entrevista a José María García y de otra que hubo y de la que no estaba enterada antes de este buceo cotilla: para el estreno de esta temporada, el Loco entrevistó al ultraderechista Ricardo Sáenz de Ynestrillas, y TVE decidió no emitirla, aunque se supone que guardaría la grabación con cariño y amor en su nevera para una futura emisión. (Hasta hoy).
TVE tiene la nevera tan llena que ya no enfría. Y Quintero me está decepcionando. Si se va por lo de García, que tiene toda la pinta, ¿por qué no lo dice? Supongo que no quiere descartar futuros trabajos para la pública; tanto silencio no lo aguanta Antena 3 ni sus amigas las televisiones high quality.
En su página web (sí, llego hasta este punto) pone: "Jesús Quintero. Todos los martes a partir de las 22,00 hrs en La Primera de TVE". Así se llama la productora. "El Silencio".

jueves, 15 de marzo de 2007

Marque con una cruz

La falta de equilibrio me desequilibra:
  1. soñadores que no tienen los pies en la tierra
  2. quienes hunden tanto los pies en la tierra que no son capaces de soñar
  3. enfadados con el mundo
  4. ennoviados con el mundo
  5. pasivos enfermos
  6. activos histéricos
  7. otros

Supongo que clasificar la vida también es un tipo de desequilibrio; supongo también que las encuestas me están afectando demasiado (demasiada gente me quiere muerta); supongo además que algunos podéis pertenecer a alguno de estos extremos; y sé que yo también.

Mi respuesta: 2; 3 y a veces 4; y, depende de para qué, 5 ó 6. A menos que me digáis lo contrario. ¿Las vuestras?

P.D.: Hipolipo, tus palabras son órdenes (no confundir con el rollo sadomaso). Bronca que me echas, entrada que actualizo.

viernes, 2 de marzo de 2007

De mayor también quiero discutir

Venía andando hacia casa por detrás de una iglesia cuyo nombre no me da tiempo a consultar en la enciclopedia googliana, cuando me he cruzado con unos cuatro ancianos con el gesto torcido. Probablemente habían salido de una tasquilla que hay en la esquina, territorio vedado para los menores de setenta y exclusivo para los jugadores de mus.


Según me he iba acercando, oía algún gruñido, algún "me cagüen la mar", algún "joé, Paco". Suelo practicar un deporte muy distractivo (ya sé que no existe). El de pensar qué piensa la gente, de qué habla, por qué habla de eso. Y eso he hecho. Pero después de haber escuchado un par de frases de aquellos hombres delgaduchos y encorvados, me he dado cuenta de que soy muy mala jugadora. No discutían por una partida de mus.

-Eso supone pensar que todos somos buenos, y somos más malos que arrancados.
-No funciona, no funciona.
-Pues yo te digo que sí, chico. Mejor que esto...
Discutían sobre el comunismo.

La primera vez que oí hablar de él tendría unos diez años. Mi enciclopedia multimedia no era entonces una web, sino mi madre, que siempre ha tenido una impresionante capacidad para integrar rostros, sonidos, imágenes, olores e historias en cada frase que dice. "Es compartir todos todo. El pan, la casa, el trabajo... Que no haya diferencias entre la gente". Algo así me dijo. Después -supongo que transcurridos unos años- lo hablé con mis amigos del colegio, y la conversación se parecía bastante a la de esos señores en la esquina de la iglesia.

Me encanta que haya temas que nunca se acaben.